Sus torres almenadas recortan el cielo reforzando su encanto medieval. Cuna de San Francisco Javier, a 8 km. de Sangüesa, al que peregrinan miles de navarros en la Javierada. Su conjunto arquitectónico, en parte reconstruido, es fascinante.
(*) Precio por persona y noche calculado en base a la tarifa vigente en fin de semana y temporada baja.
Castillo de Javier. En la parte más alta del pueblo se perfila la silueta del Castillo de Javier, casa natal del patrón de Navarra, San Francisco Javier, que allí nació en 1506. Durante los dos primeros fines de semana de marzo, tiene lugar una popular peregrinación a esta localidad, conocida como Javierada, en la que miles de personas de toda Navarra recorren a pie decenas de kilómetros para venerar al santo, cofundador de la Compañía de Jesús.
Puente levadizo, torres, mazmorras, matacanes, troneras, saeteras y almenas esperan al visitante en este castillo cuyos orígenes datan nada menos que del siglo X con su torre del homenaje. Fue parcialmente destruido en 1516 pero se reconstruyó plenamente en 1952. A finales del s. XIX a pocos metros se construyó la Basílica de Javier.