Naturaleza fascinante, una cascada semioculta por el bosque a la que iban las lamias y las sirenas a alisarse los cabellos con peines de oro. Agua cantarina, hayas, robles, avellanos y castaños nos esperan.
(*) Precio por persona y noche calculado en base a la tarifa vigente en fin de semana y temporada baja.
Cascada de Xorroxin. Como informan oficialmente, "en el pueblo de Erratzu, llegando por el barrio de Gorostapolo, a un kilómetro y medio del casco urbano y siguiendo durante cuarenta minutos un camino empedrado que baja al lado de la ermita de Nuestra Señora de los Dolores, encontramos rodeado por un frondoso bosque de hayas, robles, avellanos y castaños, una cascada preciosa de unos cuatro metros de alto llamada Xorroxin".
Hay un sendero circular señalizado desde Erratzu con una longitud de 5,60 km, un desnivel de 130 m. pero con dificultad baja para caminar por él. La cascada forma parte de la regata de Iñarbegi, uno de los manantiales del río Baztan, esto es, del Bidasoa.
El inicio se sitúa en el pueblo de Erratzu y nos lleva, entre prados, hasta Gorostapolo, agrupación de caseríos que bien merece
una visita. Y TurismoNavarra nos resume el itinerario de este modo: "Desde la ermita situada a la entrada, un camino empedrado
desciende y cruza la regata o arroyo de Iñarbegi para internarse poco a poco en el interior del barranco donde destacan centenarios castaños trasmochos. Tras cruzar nuevamente el río, un camino a la izquierda se adentra en el cauce que debemos cruzar (atención: piedras resbaladizas) para alcanzar la sonora cascada entre abundantes musgos, líquenes y helechos reales que delatan la persistente humedad. El regreso se realiza por el mismo camino hasta el puente de Iñarbegi. Por el barrio de Iñarbil, se regresa a Erratzu".